EL ESPACIO DE HERNAN HAINES |
Posted: 10 May 2012 08:00 AM PDT El rabino Sergio Bergman logró lo que se propuso, ocupar un lugar en el mapa de la política argentina. Tras coquetear con varios dirigentes y partidos opositores al kirchnerismo, el año último aceptó la propuesta de Mauricio Macri para encabezar la lista de ediles porteños. Claro está, el PRO no contaba con una sola figurita propia que pudiera liderar una nómina al tiempo que el alcalde buscaba su reelección. Había que mostrar caras buenas. Lo mismo que le ocurre ahora, con las próximas elecciones tanto porteñas como bonaerenses, en donde la única candidata "potable" sería Gabriela Michetti. Pero lo que no terminan de comprender en el PRO es que no se trata de caras lindas y piadosas, sino de gente que tome la sartén por el mango y se dedique a la gestión, algo que ni el propio Macri lleva adelante. El colmo de los colmos es que, entre otras cosas, el concejal Bergman anda de recorrida por distritos que no son la ciudad de Buenos Aires y, hasta el momento, poco y nada ha hecho por los porteños que lo votaron. Yo también fui a escucharlo a Plaza de Mayo y al Congreso. Con una excelente oratoria logró engañar a varios. Sin embargo, a mí también me perdió como futuro elector. Ahora, el rabino hace yoga en el Palacio Legislativo. Nunca menos, no? Sergio Bergman, ayer, en el ex Concejo Deliberante (la foto es de Clarín). |
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